Cáceres en sus piedras

Leyendas historicistas

 

LA HIJA DEL QAID

  El baluarte de los Pozos sobresale imponente del lienzo oriental de la muralla cacereña. Su marcado aspecto de fortaleza inexpugnable nos recuerda permanentemente que su misión, en el lejano siglo XII, era proteger los dos más preciados tesoros de Hizn Qazris: el alcázar que habían levantado en igual fecha los almohades y… ¡el agua! El arroyo de la Madre, la Ribera, de caudal por entonces generoso. A los pies del baluarte, un peñasco le sirve de asiento sólido, el mismo que los leoneses decidieron utilizar, poco tiempo después, para embellecerlo con una capilla, bajo el nombre de su patrón,…

LA MONEDA DE ORO

  En el potro de santa Clara, donde hoy se alza el convento de igual nombre a la salida por la puerta de Mérida, había una herrería donde un día cualquiera de 1473 paró un personaje llamado fray Pedro Ferrer, de la orden franciscana. Iba de retirada y cabizbajo, pues desde un año antes había intentado infructuosamente obtener del Concejo cacereño permiso y dineros para levantar en la villa un convento de su orden. No había tenido éxito su gestión. Los regidores, con el Corregidor al frente, alegaron las rotundas disposiciones de los antiguos fueros, que fueron promulgadas por el…

EL NACIMIENTO DE UNA CIUDAD

  En la muy noble y leal villa de Cáceres, a ocho días del mes de octubre de mil ochocientos ochenta y un años, dos reyes, Alfonso XII de España y Luis I de Portugal, tuvieron una cita con la historia. Las continuas discordias que enfrentaron a los dos reinos durante siglos se olvidaron en una ocasión tan propicia como inaugurar oficial y hermanadamente la línea de ferrocarril que uniría en adelante lo que el pasado se empecinó en mantener separado (leer Llamamiento a los vecinos). Los primeros silbidos de la locomotora, no obstante, ya se habían escuchado en Cáceres…