Cáceres en sus piedras

Milagros

 

EL MILAGRO DE LA VIRGEN DE LA MONTAÑA

  El siguiente relato se inspira en un pliego de cordel que se cantó por las calles de Cáceres en 1858. En él se narraba el milagro que obró la virgen de la Montaña en la persona de un humilde jornalero de Fuente de Cantos y del que nada se ha escrito ni referido en la ciudad de la que es patrona hasta la edición del relato en el libro Relatos del Cáceres olvidado. * * * El hombre agonizaba en la cama, mientras sus hijos pedían limosna por las calles de Fuente de Cantos. — Llama al cura. Quiero…

ÉXTASIS DE UN FRAILE CACEREÑO

  Fray Bernardino de Cazeres gozaba en vida de fama de santo varón, y esa fama le precedió cuando cierto día llegó a Valladolid, llamado al Capítulo General de la orden de san Francisco. El cacereño, entrado ya en años, se presentó con su solo hábito gris ceniza, polvoriento, sin alforja alguna para el duro y largo camino que en las jornadas precedentes había realizado con la compañía de un joven hermano del convento.   Fray Bernardino, llamado de Cazeres en honor a su patria, nació en esta villa en los albores del siglo XVI, en el seno de la…

TRABAJOS Y MILAGROS DE UNA MONJA II

  Sigue a Trabajos y milagros de una monja en Cáceres I En una ocasión que venía de comulgar, Dios se presentó a sor Juana de la Madre de Dios, monja en el convento de la Santísima Concepción de la villa de Cáceres, y le mandó dijese el Credo. Conoció, por la solicitud, que su muerte estaba cercana y redobló, con resignación, sus oraciones. A su término, recibió un nuevo mandato: – Ofrécelo todo por este religioso que bien conoces y debes saber que está enfermo -le dijo la voz, acerca de un fraile del que la crónica no da…

TRABAJOS Y MILAGROS DE UNA MONJA I

  Doña Juana de Moscoso y Becerra tomó hábitos en el desaparecido convento de la Concepción de Cáceres en 1651, procedente de su villa de origen, Badajoz, tomando por nombre sor Juana de la Madre de Dios. Al poco de ingresar, padeció una maligna enfermedad que le duró doce años, al término de los cuales quedó maltrecha y tullida hasta el grado que, en lo que restó de vida, era atendida en todas sus necesidades por varias hermanas.   De la vida, obra y milagros de sor Juana de la Madre de Dios guardó crónica el médico de la villa…

EPIDEMIAS Y LA VIRGEN DE LA MONTAÑA

  En 1665 hubo en la villa un fuerte contagio de peste. El brote provino de veinticinco soldados, de un tercio de esguízaros, soldados de infantería, que entró en la población en julio, de retorno del desastre español en la batalla de Villaviciosa, en que resultaron victoriosos los portugueses, camino de su independencia del reino de España. Previendo males mayores, el entonces médico principal de Cáceres, don Bartolomé Sánchez, ordenó el inmediato ingreso de los veinticinco infectados en el hospital de la Piedad, convertido luego en la Real Audiencia de Extremadura, y administrarles la extremaunción, así como solicitar el cierre…

MILAGROS DE LA VIRGEN DE VALVANERA EN CÁCERES II

  Sigue a Milagros de la virgen de Valvanera en Cáceres I He aquí la relación de los milagros y prodigios obrados en Cáceres en el segundo tercio del siglo XVII por mediación de Nuestra Señora la Virgen de Valvanera, a través de las cenizas de la cocina santa de su Santuario en las lejanas tierras de la Rioja, traídas a la villa por una devota cacereña llamada Inés de Jesús, recogidos y anotados por el cronista benedictino fray Diego de Sylva y Pacheco.   * * *   En el año de 1663, en la villa de Cáceres de…

MILAGROS DE LA VIRGEN DE VALVANERA EN CÁCERES I

  Sigue a Las cenizas de la cocina santa de Valvanera A mediados del siglo XVII, una cacereña llamada Inés de Jesús regresó de una peregrinación al santuario de Nuestra Señora de Valvanera, en las lejanas tierras de la Rioja, portando en la faltriquera varias onzas de ceniza de la cocina santa e imágenes y una medida de la citada Virgen. Rápida circuló esta feliz por la villa de Cáceres, y como en el recuerdo de muchos aún estaba presente lo sucedido a doña Inés de Cotrina, los enfermos, cuando los médicos se declaraban impotentes para curar sus dolencias, comenzaron…

LAS CENIZAS DE LA COCINA SANTA DE VALVANERA

  A mediados del siglo XVII era tal la devoción que en Cáceres suscitó la imagen de Nuestra Señora de Valvanera, que se decía que cuando los remedios aplicados por los médicos de la villa no surtían efecto, éstos aconsejaban a los familiares de sus pacientes que pidieran favor a aquella virgen, a través de la ceniza de la cocina santa traída de su santuario, levantado desde tiempos muy lejanos en los valles de la sierra de la Demanda, en la Rioja. La tradición benedictina asegura que san Atanasio, obispo de Alejandría en el siglo IV, huyendo de la furia…

LA ESTAMEÑA

  Relación con Cáceres no tuvo directamente sor Mariana Francisca de los Ángeles, religiosa carmelita descalza que profesó primero en el convento de Ocaña y luego fundadora del de santa Teresa de Madrid. En nuestra vieja villa, se tuvieron noticias de la vida y de los milagros y prodigios que obró esta extática monja por mediación de la cacereña doña Manuela de Alencastre y Noroña, hija de los duques de Abrantes y Linares. Doña Manuela partió joven del cómodo domicilio de sus padres con el firme deseo de renunciar al siglo, pero su fe tambaleó en el retiro de su…

LA MONEDA DE ORO

  En el potro de santa Clara, donde hoy se alza el convento de igual nombre a la salida por la puerta de Mérida, había una herrería donde un día cualquiera de 1473 paró un personaje llamado fray Pedro Ferrer, de la orden franciscana. Iba de retirada y cabizbajo, pues desde un año antes había intentado infructuosamente obtener del Concejo cacereño permiso y dineros para levantar en la villa un convento de su orden. No había tenido éxito su gestión. Los regidores, con el Corregidor al frente, alegaron las rotundas disposiciones de los antiguos fueros, que fueron promulgadas por el…